El peso argentino fue la moneda que más se fortaleció en 2024 a nivel internacional

En 2024, el peso argentino experimentó una apreciación del 40% en términos reales desde diciembre de 2023, destacándose como la moneda más fortalecida a nivel mundial. Este fenómeno se atribuye a un esquema cambiario basado en controles estrictos, como el cepo, y una devaluación mensual programada del 2%, muy por debajo de la inflación acumulada durante el año.

La política cambiaria ha tenido efectos significativos en distintos sectores económicos. Por un lado, el tipo de cambio real multilateral alcanzó mínimos históricos desde 2015, afectando la competitividad externa y el saldo de cuenta corriente, que mostró déficits consecutivos en el tercer trimestre, acumulando una salida de USD 3.636 millones. Este déficit también refleja un aumento en la salida de divisas por turismo, favorecida por un tipo de cambio bajo en términos reales.

Sin embargo, el sector energético podría equilibrar el panorama en el mediano plazo. Se proyecta un superávit de USD 7.400 millones para 2025, gracias a mayores exportaciones de gas y petróleo. Esto podría aliviar parcialmente la presión sobre las reservas y compensar desequilibrios en otros sectores.

En cuanto a los costos laborales, los salarios en dólares están por debajo de los niveles de años anteriores. Esto, sumado a las iniciativas gubernamentales de reducción del gasto público y posibles reformas estructurales, podría mantener el tipo de cambio apreciado sin comprometer la sostenibilidad económica. A pesar de esto, la presión sobre la competitividad sigue siendo un desafío importante, particularmente frente a socios comerciales como Brasil, cuya moneda se ha devaluado significativamente.